jueves, 7 de enero de 2010

"Feliz, feliz en tu día, amiguito que dios te bendiga..."




El pasado 24 de Noviembre festejé con mis familiares más íntimos, ya que el escaso espacio no remitía más, mi 1er cumpleaños en el nuevo departamento que habito desde hace casi 1 año. Fue la 1ra vez que organice yo solo mi reunión, tal vez pueda parecer como medio pelotudo que haya decido armar un comentario sobre este hecho de apariencia tan simple, pero es así señores, para mi fue un momento importante. Tal vez no fue exactamente como lo había imaginado meses antes; todos vestidos de blanco, tomando un drinks en la terraza, con pantallas de papel del mismo tono y bajo la presencia de un cielo plagado de estrellas, como aquella noche de verano que presencié hace unos años en San Martín de los Andes y que jamás olvidaré. No diré que mi humilde evento fue la antítesis, pero fue tan o más hermoso que aquella noche en el sur Argentino. Fue un día con un humedad del 95% con una amenaza constante de lluvia pero que igualmente nos permitió realizar el evento en mi hermosa terraza, con una improvisada pero cálida iluminación y rodeado solo de mis familiares más íntimos (La cita con amigos se realizó otro día.) La única que faltó y con previo aviso, fue mi amada abuela con sus primeros 100 años de vida.
Armé un banquete, sujeto a mis limitaciones culinarias, digno de la admiración y gratitud de cada uno de mis invitados, quienes me lo hicieron saber, cada uno a su manera, ubicados alrededor de una linda mesa en la que no faltaron snack, distintos tipos de salsas picantes para untar, sándwich de miga, empandas de carne, mini panchos y unas deliciosas brusquetas de muzzarella, tomate y albaca y otras de jamón crudo. Las cuales amasé con mis propias manos!!! (Si leyeron bien.) Todo esto coronado por una variedad de distintas tortas, vinos, gaseosas (En mi humilde opinión, el mejor invento de mundo) y café para terminar la noche. Por supuesto, la que tuvo que romper con esa mágica noche, en la que finalmente lograba ser el anfitrión de mi propio hogar, por el cual he luchado tantos años, fue mi querida madre. Que con todo el amor que me podía dar, ya que es una incondicional, no solo de sus hijos sino de todos los seres que ama y se entrega día a día. En tono de secreto me dijo: "Santi, las brusquetas tenes que dejaras un rato más en el horno, para que formen un poco más de piso, sabes mi amor".  Obviamente que nunca le contesté, y supe guardar un silencio sepulcral, acompañado de una elegante sonrisa a medio labio. Porque la amo tanto, que soy capaz de perdonarle no solo este comentario sino muchos más. Como no voy a ser un director de teatro tan insoportablemente obsesivo con la madre que tengo! Seré un fiel reflejo de ella y por eso me molesta tanto verme reflejado? Lejos de ver el esfuerzo que significó para mí solo montar todo ese festejo, sin ayuda de nadie, porque así lo quise. Cuando hacia apenas meses no sabia cocinarme ni un huevo frito y ella solo de detenía en ese detalleeeee ???? Ahhhhhhhhhhhhh... (Tres minutos después, ya más calmado.) Tengo la plena seguridad que jamás intentó herirme y mucho menos estropear ese momento, solo que en mi familia somos tan exigentes con nosotros mismos, que muchas veces no sabemos callarnos la boca y rescatar lo bueno de la otra persona, que en la mayoría de los casos es mucho más que lo malo. Meditándolo, al día siguiente, pude encontrarme a mi mismo en el pasado realizando el mismo tipo de comentario a muchísima gente que ha laburado conmigo (Si alguno de ellos está leyendo esto, les pido perdón.)

Una de las tantas cosas buenas que te da el cumplir años, es la experiencia y la misma te permite darte cuenta de tus errores, o por lo menos de alguno de ellos. Y saber que en el futuro los corregiré o por lo menos haré "todo lo posible" para no verme repetir esas acciones.
Me hubiese encantado también haber podido invitar a más gente, amigos, compañeros de trabajos, ex actores que han trabajado conmigo, etc. Pero algunos impedimentos, además del espacio físico y de factor económico, se me cruzaron en mi camino, al margen de que muchos de ellos, tal vez producto de mi exigencia, hoy no están al lado mío.
De esto se trata mi blog catarsis entre otras cosas, de empezar a mejorar aspectos de mi vida que ya no me interesan. También es verdad, que muchas de estas personas, una vez que ya no hubo "obra pendiente o fututo trabajo", se alejaron sistemáticamente de mi lado, pero tampoco me voy a atribuir toda la culpa a mí. Eso si que lo tengo claro, los verdaderos amigos están en las buenas y en las malas y si algo tiene de bueno el momento que estoy pasando desde hace unos años, es que me ha servido, no solo para reflexionar, sino para saber quienes eran mis verdaderos amigos y que esos, como la ley manda, son pocos. Ellos hubiesen aceptado con la misma alegría mi lujoso banquete aniversario, del mismo modo que si los hubiese invitado a comer un plato de fideos con manteca.

Conclucion: Hoy tengo la plena seguridad que los verdaderos amigos y ni hablar de mi numerosa familia, no solo están en las fiestas con pantallas blancas, sino que también están cuando un día de semana los invito a comer un simple y exquisito plato de fideos en mi pequeña cocina amarilla.

Continuará...

2 comentarios:

  1. jaaaajajaja, cómo me hiciste reir a mitad del relato!! estaba super concentrada, visualizando y hasta oliendo todo, y de golpe ZAPATE, las benditas madres y sus cosas.
    Me encantó lo que escribiste, y a la vez me sirve ya que por lo gral. soy de las pelotudas que creen que si no tengo la casa reluciente y caviar y champagne, mis amigos no van a disfrutar el momento.´
    Qué loco, no? porque los momentos que yo más disfruto con la gente que quiero, son precisamente los improvisados, los "emparchados", sintiéndome casi siempre incómoda en los muy estructurados.
    Me voy en penitencia al baño, a reflexionar sobre mis actos!!!
    Te quiero mucho

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  2. Me hiciste acordar a la canciòn de Ignacio Copani, esa que dice: "Bronca porque somos...." y no me acuerdo màs, jajajja, pero se que dice todo el tiempo la palabra bronca. Jajaja, sos un personaje Sonia, me alegra enormemente que te haya gustado el blog. Te cuento que sos la 1er. persona que lo lee, ya que mi idea incial era escribirlo solo para mì, como dice el pròlogo, como una especie de catàrsis y de observaciones que hago sobre mi vida o bien cuando siento que la misma me està pasando fuera de mi. Es como una especie de llamado de atenciòn a mi mismo. Y como bien sabès que la exposiciòn no es lo que màs adoro, decidì mantener, por lo menos hasta que se pueda, mi identidad en secreto. Ya que por màs que uno intente filtrar info, como te daràs cuenta cada texto habla de mì.

    Con respecto al tìtulo, no me voy a tomar el crèdito querida Sonia, ya que fue afanosamente insirado en un pelìcula, tristemente hermosa, llamada "MI vida sin mi". La misma està producida por los hermanos Almodovar, y como ya sabràs, todo lo que viene de ese hombre me atrapa incondicionamente. Volviendo al tìtulo, como no podìa ponerle el mismo, lo transformè que algo que habla mucho mejor del momento q estoy pasando.

    Bueno Sonia, me alegra que te haya gustado y no te tires abajo por dios!! porq tu blog es excelente. Podes recomenadr el mìo a cualqueir persona que desees, obviamente sin deschabarme.

    Nos vemos este año sin falta en España.

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