martes, 13 de abril de 2010

YENDO DE LA CAMA AL CINE



















No se que pasa con el cine Argentino, ya que no creo que sea un problema de los últimos años, pero desde que tengo uso de razón o mejor dicho desde que me he vuelto un asiduo seguidor de las películas nacionales noto la falta de buenos guiones que existe dentro de la industria de nuestro país. Ojo que no es una apreciación mía en particular, sino que mucha gente del palo del cine y ni que hablar de los "señores críticos" opinan lo mismo. Al margen de que en este último caso, los cuales funcionan de la misma manera que los de teatro, siempre le van a encontrar el pelo al huevo (Siempre.)
Desde mi lugar de simple espectador, disfruto enormemente ver cine con la excelencia y el calor que le imprimen sobre todo los actores Argentinos, de hecho en nuestro país tenemos un nivel inmejorable de directores que laburan en varias partes del mundo, de productores, directores de fotografía y ni que hablar de los "milagros" que se hacen para finalizar un rodaje en la mayoría de los casos casi sin presupuesto o lo que es peor hipotecando sus propios hogares. tarea de "hacer cine", la cual en la mayoría de los casos pasan varios años hasta su estreno, es digna de mi admiración. En este aspecto hacer teatro es mucho más accesible y palpable, pero bueno este otro tema.

Desde el día que me enteré que Graciela Borges y sobre todo Antonio Gasalla estaban filmando una película juntos y a pesar de que Burman (Su director) no es santo de mi devoción, me ilusioné mucho con el día de su estreno el cual no se hizo esperar demasiado. Uno de los mejores cómicos de nuestro país (vivo) junto a una de los referentes máximos del cine Argentino eran reunidos en la pantalla grande. Obviamente la misma semana del estreno fuimos con mi amiga "G" a verla. De más está decirles que no había posibilidad de pasarla mal en el cine y así fue. Ver al genial señor. Gasalla dentro de una comedia dramática haciendo de viejo gay y muy bien acompañado por la Borges, quien juega de su hermana dentro de una mezcla de borracha social y loca linda fue impagable. Lo único malo de película, y no es un detalle menor, es el flojo guión que presenta; como en la mayoría de los películas Argentinas el punto débil radica ahí. Prácticamente la línea argumental se reduce a los comportamientos de cada personaje (Incluyo también los roles secundarios) a través de distintas situaciones dejándonos bien en claro la patología de cada uno de ellos y deteniéndose (Solo un poco) en la relación de ambos hermanos. Lastima porque la película, haciendo a un lado las gloriosas actuaciones de sus protagonistas, está plagada de buenas intenciones y momentos que luego no son transitados en profundidad o directamente, tal vez debido a la crueldad de la edición, fueron abortados pasando a mejor vida.
Al margen de que la película está muy filmada, con excelentes planos y con una fotografía exquisita (Se filmó parte en Bs As y parte en Uruguay) Las escenas dentro del teatro de “Villa Laura”, las calles del pequeño pueblo de Uruguay con las fachadas de sus locales estancados en los años 70 son muy bien recibida. Párrafo aparte para el actor que hace de director de teatro, plagado de excelentes cliches que solo reconoceremos los que estamos en el palo. Pero la historia amigos!! Falla, no cierra, no es potente, está inconclusa, se queda en cartilla en la cartilla de presentación de los personajes y no avanza. Hasta el mismo final, tema que no abordaré (Lógicamente) contiene un plano hermoso pero que huele a: “No se como cerrar esta historia por lo que pongo esta bella imagen… FIN” (Véanla es bella con “B” grande.)


Me pregunto a mì mismo:

Porque siempre en nuestro cine fallan las historias? o la historia es muy pequeña y hacen durar las secuencias indefinidamente, convirtiéndose en esas películas en las que pareciera que nunca pasa nada? (La única que se maneja bien en ese estilo de contar la nada es Lucrecia Martel - opinión personal)
Hasta cuando el cine Argentino se va a seguir apoyando solo en la actuación del actor como si eso fuera todo? En este punto siento que tenemos que aprender de la producción de otros países, y no me estoy refiriendo a Hollywood solamente porque ellos también hacen cagadas. Pero la seriedad, el tiempo, el trabajo casi de relojería que se le da al guión es algo que en nuestro cine pocas veces se ve. Lo comprendería tal vez si estuviera hablando de algún director de cine novato, el cual tal vez no tenga aún las herramientas o los medios para conformar un guión sólido. Pero estos monstruos como Burman, que laburan con una muy buena producción, que ya ocupan un lugar importante dentro de la cartelera local y en el mundo inclusive, que hasta tienen un canal de TV atrás apoyando su proyecto y cuentan con semejante elenco Premium… no es justo. No perdono, como simple espectador, que el guión sea tan flojo; además tampoco es una cuestión de dinero confeccionar un buen guión. Igualmente creo que es un problema mundial, el tema de los buenos guiones, no es casual que en USA (Una de las cunas cinematográficas del mundo) cada vez hagan más secuelas o versiones agiornadas de viejas películas o bien adaptaciones de novelas consagradas como "best seller".

Obviamente en el caso de "DOS HERMANOS" (No se a quien le puede llegar a interesar mi opinión) "Hay que ir a verla", solo por ellos dos vale la pena movilizarse y salir de la comodidad de la cama y el DVD e ir al cine.
Ahora bien, como reflexión final de todo este post con ambiciones no alcanzadas de crítico frustrado me quedo con el siguiente pensamiento: Si tan solo con dos actores de un carácter soberbio como la dupla formada por Gasalla-Borges se puede hacer una película buena y digna de disfrutar como la de Burman, cuan mejor sería que la misma esté complementada con un sólido guión que cuente una historia contundente?


Alguien ya la vio? me gustaría escuchar alguna otra voz.


Continuará...
PD: La cereza del pastel: quédense en la sala a ver todos los créditos, les aguarda una grata sorpresa.

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